La iluminación es absolutamente clave para un buen diseño interior en su hogar, ya que no solo afecta el tamaño percibido de una habitación, sino que también cambia el ambiente, su estado de ánimo y la forma en que utiliza el espacio. La buena iluminación es mucho más que simplemente elegir una atractiva pantalla, con todo tipo de elementos que necesitan unirse en armonía si se quiere crear un espacio que realmente brille.
Al elegir el tipo de iluminación adecuado para una habitación en particular, hay cuatro elementos principales que debe tener en cuenta.
Luz Natural.
En las conversiones de sótanos o apartamentos de ciudades pequeñas, a menudo falta luz natural y su elección de iluminación necesita compensar. Las luces de techo dan un brillo central que no es particularmente efectivo en una habitación con poca luz solar, y la elección de lámparas de pared, lámparas de mesa y luces elevadoras puede ayudar a garantizar que la luz llegue incluso a los rincones más débiles.
- Las luces de pared y los elevadores estratégicamente ubicados ayudan a difundir la luz en la habitación, mientras que las luces de mesa pueden brindar esa sensación cálida y acogedora.
- Las luces de imagen también pueden ser una sabia elección en habitaciones más oscuras, ya que pueden concentrar la luz donde más la necesitas.
Colores.
El color de una habitación afecta en gran medida en el estado de ánimo, y la iluminación debe complementar su combinación de colores. Las habitaciones pintadas en colores más oscuros tienden a hacer que un espacio se sienta más pequeño y quizás más estrecho, mientras que los colores claros ayudan a dar la impresión de un espacio mucho más grande.
- Por lo tanto, no hace falta decir que las habitaciones más oscuras se beneficiarían de una iluminación interior más brillante, con luces de techo más grandes, tal vez con focos direccionales, que ayudan a iluminar el espacio.
- En habitaciones de colores más claros, puede permitirse algo un poco más sutil, con luces de pared más suaves o luces empotradas que ayudan a proyectar la luz hacia arriba y hacia abajo, iluminando los techos y los pisos.
El tamaño de la habitación.
Los mismos principios se aplican a las habitaciones pequeñas como a las habitaciones pintadas en colores oscuros o que carecen de luz solar. Si un espacio es pequeño y tal vez se siente un poco abarrotada de muebles, es clave asegurar que la luz se distribuya de manera uniforme.
- Las luces de esquina y las luces del techo ayudan a difundir más la luz, creando la ilusión de más espacio. En las habitaciones más grandes, las luces de la imagen ambiental y las lámparas de mesa pueden hacer que el espacio sea más acogedor y quizás menos intimidante, lo que permite un ambiente más relajado.
Mueble.
Su iluminación debe complementar y sacar el máximo partido a su elección de muebles, y los principios rectores son los mismos. Si tiene sofás de cuero oscuro o muebles de caoba oscura, por ejemplo, una habitación a menudo puede sentirse cerrada y apretada.
- El uso de luces brillantes en el techo abrirá el espacio, especialmente si elige luces o pantallas de estilo araña que permiten que brille más luz a través de ellas.
- Si sus muebles son más livianos o han optado por un estilo más minimalista y contemporáneo en su habitación, Las luces de pared con estilo y las luces para cuadros son más direccionales y pueden ayudar a resaltar piezas de muebles llamativas a las que desea llamar la atención.
La iluminación es una de, si no es la parte más importante de cualquier interior. Es la característica que establece el tono y el ambiente del interior, al mismo tiempo que lo convierte en un espacio práctico para la función deseada, por lo que es vital que dedique tiempo a crear una configuración de iluminación dentro de cada interior para garantizar que la habitación se adapta perfectamente a su finalidad.
